El informe, escrito por Joseph E. Stiglitz en colaboración con diversos expertos en economía de todo el
mundo y apadrinado por Naciones Unidas, pone el énfasis en la necesidad de tomar medidas urgentes a nivel internacional
(y no solo local) para evitar que la presente crisis económica mundial acabe agudizando las diferencias entre las
economías desarrolladas y las economías menos desarrolladas. Extremadamente crítico con las políticas económicas
neoliberales que han imperado en los mercados en los últimos decenios, incide en la necesidad de tomar medidas
destinadas a recuperar la economía evitando la desregulación y los recortes en áreas sensibles para el desarrollo de
las sociedades.