Wonder Ponder es un proyecto de filosofía visual para niños en el que, a través del arte y el juego, la curiosidad y la reflexión, se invita a los lectores a desarrollar un pensamiento crítico e independiente.
¿Matar hormigas te parece cruel? ¿Te gustaría vivir en un zoo? ¿Por qué? ¿Es siempre cruel obligar a alguién a hacer algo que no quiere hacer? Y tú, ¿qué piensas?
Acerca a los pequeños lectores a algunas de las grandes preguntas de la filosofía de forma divertida y atractiva. Escenas curiosas y preguntas intrigantes invitan a la reflexión y al diálogo, estimulando el desarrollo de un pensamiento propio y facilitando la construcción de un mapa visual sobre cada cuestión.
Mundo cruel incluye 14 láminas con escenas que dan mucho que pensar, más de 100 preguntas para mentes intrépidas, guía filosófica para niños y adultos y muchas cosas más. ¡Abre, mira y piensa!
A partir de 8 años.
Leer para hablar, para escribir y para pensar. La lectura nos da palabras para expresarnos y reconocernos, para ponerle un nombre y no otro a lo que sentimos y deseamos. Pensar no es fácil. Tener ideas propias sobre lo que nos rodea, tampoco. Por eso los libros nos dan palabras de las que nos apropiamos para poder decir y decirnos. Esta caja con un título sonoro en inglés WONDER PONDER (Preguntar y reflexionar) está repleta de palabras y de dibujos sobre un concepto complicado y arriesgado: La crueldad y nos invita a explorar los muchos sentidos que este concepto tiene, a voltearlo, exprimirlo, estirarlo... Y escoge una fórmula antigua que fue la preferida de muchos filósofos como es la conversación a partir de preguntas. No se trataría solo de hablar, sino de hablar a partir de la reflexión que nos provocan un buen número de preguntas que surgen a partir de ilustraciones. Y aquí reside una de las claves de esta propuesta, el enfoque humorístico, irónico o satírico que ofrecen las ilustraciones. Sin esta mirada la propuesta sería otra. En unos tiempos en los que los mediadores están preocupados por la educación de sus retoños, el camino de la conversación y las preguntas resulta un instrumento excelente para invitar a pensar. La caja tiene una pega importante, no hay hojas de respuestas verdaderas, no hay un libro del padre o del profesor que oriente en una única verdad. Esta caja obliga a pensar a todos, invita a la duda, a la perplejidad y a darle un valor a todas las respuestas.