Juan Ignacio Ojeda ya nos relató en su anterior novela histórica, Omar ben Safsum como éste creó en el siglo IX dentro del emirato árabe un amplio estado andaluz (Córdoba, Jaén, Sevilla, Granada y Málaga) basado en la convivencia de árabes, cristianos y judíos. En este libro cuenta de manera amena y rigurosa la suerte que tras la muerte de Omar corrió dicho estado cristiano hasta su destrucción por el califa Abd er Rahaman III, creador del califato y primer califa omeya, así como la historia de sus hijos, uno de los cuales, Sulaymán, se enfrentó con éxito al califa durante siete años, y otra, Santa Argentea, es venerada como virgen y mártir de la Iglesia Católica.
