En este brillante texto, escrito en 1971 e inédito hasta el momento, Ana María Moix, sin duda una de las mejores escritoras de nuestros días, traza un retrato irónico de la gauche divine, aquel grupo de intelectuales y artistas que en la Barcelona de los sesenta llevó a cabo una seria (y al tiempo divertida) revolución cultural que consiguió renovar el aire enrarecido y gris del franquismo. Por estas páginas desfilan editores, novelistas, poetas, diseñadores, arquitectos, agentes literarios, fotógrafos, modelos y actores. El paseo de la autora a lo largo de estas veinticuatro horas nos lleva de la tienda de Montse Esther a la Editorial Lumen y luego a Seix-Barral, cuyo capitán, Carlos Barral convoca un premio literario en el que resulta ganador un niño al que apadrinan un importante autor latinoamericano y una "superagente" literaria. En una reunión de la distribuidora Enlace, un joven Jorge Herralde, que acaba de iniciar su aventura en Anagrama, se lamenta con Barral, Castellet y otros editores de la inminente defunción de sus negocios. Beatriz de Moura y Oscar Tusquets (que acaban de fundar Tusquets Editores), Jaime Gil de Biedma, Juan Marsé, Gabriel Ferrater, Rosa Regás, Oriol Bohigas o Mario Vargas Llosa son algunos de los protagonistas de esta crónica genial, mordaz, sarcástica y desternillante que tras su mascarada esconde lo que es quizá la mejor radiografía de aquella época que jamás se haya hecho.
Al final y a modo de epílogo, se incluyen unos cuestionarios, también formulados en la época, en que los protagonistas de la gauche contestan a cuatro preguntas sobre ellos mismos, un documento verdaderamente impagable.