Es un estudio comparativo de la novela negra y de la ciencia ficción hispana por medio de dos conceptos: poshumanismo y apocalipsis. Además de investigar en detalle los aspectos formales de cada género, se inquiere sobre el virulento desorden social -la irracionalidad, la violencia, las aspiraciones materiales desmedidas y el desprecio a la vida humana-, el cual termina en el crimen desenfrenado, dejando de lado todo código ético y la búsqueda de un progreso colectivo. Se explora el sentido catastrófico a través del espacio citadino en ruinas, la muerte a borbotones, las prácticas espirituales alternativas y la desesperanza de un futuro mejor que carcome al individuo y lo hace pensar en la destrucción de su propia existencia. En estos géneros populares, el poshumanismo apocalíptico se impregna de una ardua crítica social para manifestar el desencanto proveniente de fallidas revoluciones, dictaduras militares y de la globalización. Se exhibe la dependencia tecnológica, la desmitificación de la superioridad y el frágil dominio del individuo dentro de la larga evolución y transformación de la especie.
