Durante la £ltima etapa de la Guerra de Espa¤a (1936-1939) y la primera posguerra inicial el territorio cordobs se convirti¢ en una inmensa prisi¢n, recluyendo a m s de 60.000 evadidos y prisioneros de guerra republicanos repartidos a lo largo de trece campos de concentraci¢n, sin contar con otros miles de excombatientes pertenecientes a las filas del Ejrcito Popular que fueron integrados en una treintena de Unidades de Trabajos Forzados. Estos cautivos sufrieron toda clase de penalidades y represi¢n, siendo reutilizados como mano de obra semiesclava en trabajos civiles y militares para lograr finalmente recuperarlos para la causa franquista una vez hab¡an sido clasificados, adoctrinados y domesticados; teniendo que haber demostrado suficientes pruebas de arrepentimiento y sumisi¢n durante todo el periodo de castigo al que fueron sometidos hasta poder expiar la culpa de haber defendido la legalidad vigente, sin ni siquiera estar condenados por ello.