SA.180 A LA ESCUCHA DE LA MADRE TERESA

SA.180 A LA ESCUCHA DE LA MADRE TERESA

TERESA DE CALCU / GONZÁLEZ-BALADO, JOSÉ LUIS / PLAYFOOT PAGE, JANET NORA

14,00 €
IVA incluido
Consulta disponibilidad
Editorial:
PROMOCION POPULAR PPC
Año de edición:
2013
ISBN:
978-84-288-2479-8
Páginas:
280
Encuadernación:
Rústica
Colección:
SAUCE
14,00 €
IVA incluido
Consulta disponibilidad

 
¡Gracias, Madre Teresa!
            De Albania a la India. Y de la India al mundo entero
            «Una gota en el océano», decía ella
            Una «misión de amor universal»
            Madre Teresa de Calcuta (y de Malcolm Muggeridge)
            Madre Teresa... ¿simple beata?
La Madre Teresa pidió a Juan Pablo II -y obtuvo- un trocito de Vaticano para sus pobres
Madre Teresa del mundo entero (incluida la Península Ibérica)
La primera vez que la Madre Teresa vino a España
Primeras misas de la Madre Teresa en Madrid (y en París)
El recuerdo de Paquita Gallego
El español que había aprendido la Madre Teresa en América
Su amiga, la reina Doña Sofía
La labor en España de las Misioneras de la Caridad
La Hermana Mary Prema, segunda sucesora de la Madre Teresa
Una inauguración muy simple
Récord de besos en Barajas
            De nuevo, ¡gracias, Madre Teresa!
            Un anticipo del cielo
1. A disposición de Jesús
2. Tatuados en la palma de la mano de Dios
3. El rostro de Dios reflejado en los pobres
4. En los pobres servimos a Jesús
5. Nuestros hermanos los pobres
6. Sufrir con una sonrisa
7. ¡Lo hermoso que es compartir...!
8. Ante todo, conocer a los pobres
9. Ver a Dios en los que sufren
10. Los pobres, predilectos de Dios
11. Los pobres nos guían hacia Dios
12. ¡Yo estoy en favor de la vida!
13. Oraciones atribuidas a la Madre Teresa
14. Sonreír a Jesús en los pobres

Asomarse a la figura de la Madre Teresa despierta inmediatamente un sentimiento de sincera y admirada gratitud. ¿En quién, nada más evocar a la Madre Teresa no surge espontánea una tan sincera como conmovida admiración? ¿Y quién, si se detiene un poco a analizar su propia admiración, no la advierte íntimamente teñida de gratitud? Una gratitud que es casi responsabilidad de corresponder a algo que se prolonga y se repite observando lo que sus hijas, las Misioneras de la Caridad y el resto de la familia virtual de sus colaboradores siguen encarnando día a día con humilde fidelidad. Las razones de gratitud a la memoria viva de la Madre Teresa de Calcuta son tan objetivas como real y discretamente observable y visible fue su largo e intenso paso por este mundo.
En efecto, la Madre Teresa vivió largamente entre nosotros, sin ocultamientos dictados por el egoísmo ni por un falso pudor, pero aún menos por la comodidad. Su fe y servicialidad la mantuvieron en una permanente búsqueda de Jesús. De un Jesús a quien, fiel a la doctrina de él captada y fielmente observada, identificaba y servía en los pobres -o, como decía ella, los «Pobres», con mayúscula-, unos pobres que viven o malviven entre la gente, a nuestro lado y a diario.